Maritza Isabel Quiroz Leiva

Con 60 años, fue una lideresa muy reconocida por su comunidad, era suplente de la Mesa de Víctimas del municipio de Santa Marta y líder de mujeres afro víctimas de desplazamiento. El 5 de enero, Maritza se encontraba en su casa cuando dos sujetos tocaron a su puerta, ella le dijo a su hijo menor que fuera a esconderse. Al abrir, uno de ellos le disparó en dos ocasiones. La lideresa había recibido amenazas en el 2018 y la Corte Constitucional había solicitado protección para ella.

Natalia Jiménez

Con 35 años, fue ecologista, antropóloga y trabajaba con la Fundación Natura, allí dirigía el proyecto Magdalena-Cauca Vive, que se enfocaba en la conservación de la cuenca de los ríos Magdalena y Cauca. El 20 de diciembre, Natalia se encontraba junto a su pareja celebrando su luna de miel y se dirigían hacia el municipio de Palomino en La Guajira. Ella hablaba telefónicamente con su padre cuando la amenazaron de muerte para que parara el vehículo y colgara el teléfono. El 23 de diciembre los cadáveres de Natalia y su pareja fueron encontrados por un campesino en la vereda Perico Aguao en Santa Marta, los cuerpos tenían capuchas en la cabeza, manos atadas, signos de tortura y tiros de gracia.

Maria del Pilar Hurtado Montaño

con 34 años, fue lideresa comunitaria de la Fundación de Víctimas Adelante con Fortaleza (Funviavor) del Cauca, se desplazó a Tierralta al ser previamente amenazada por denunciar sobre los lugares de desaparición forzada, asesinatos y las llamadas 'casas de pique' (centros de tortura) que tenían narcotraficantes y paramilitares en el municipio de Puerto Tejada, Cauca. Con el ánimo de conseguir una casa propia, Maria del Pilar hizo parte de un asentamiento ubicado en un lote en desuso que pertenecía a un hombre poderoso de la región. El 21 de junio, fue asesinada en el barrio 9 de Agosto de Tierralta, cuando hombres armados la atacaron con arma de fuego dejándola tendida en el piso delante de dos de sus hijos. Maria del Pilar era madre de cuatro hijos y, al parecer, había recibido una amenaza en un panfleto firmado por las supuestas Águilas Negras, grupo cuya existencia es negada por las autoridades.

Carlota Isabel Salinas Pérez

Fue miembro de la Organización Femenina Popular (OFP) y defensora de derechos humanos del municipio de San Pablo, donde también trabajó varios años en gestión del riesgo de desastres, acción social y gestión ambiental. El 24 de marzo, hombres armados llegaron hasta su casa ubicada en el barrio Guarigua y la obligaron a caminar algunos metros y posteriormente, le dispararon. Carlota era madre de tres hijos.

Yadira Rodriguez Cuadro

Con 40 años, perteneció a la Junta de Acción Comunal del barrio 7 de Agosto de la ciudad de Cartagena. El 30 de agosto fue asesinada por su expareja, Omar Marrugo Villadiego, quien le disparó en tres ocasiones delante de una de sus hijas. El feminicida, posterior al asesinato, le fracturó el brazo a un hijo de Yadira y salió huyendo en un vehículo. En grave estado de salud fue trasladada a un centro médico de la ciudad pero no pudo ser salvada. Yadira era madre de tres hijos y venía denunciando amenazas por parte de su expareja a las autoridades.

Maria del Carmen Florez

con 37 años, fue contratista de servicios generales de la Alcaldía de Ocaña y lideresa comunitaria que participó activamente en varias campañas políticas, además de ser reconocida como lideresa en el barrio Altos del Norte del municipio. Fue asesinada el 16 de mayo mientras se movilizaba en motocicleta, cuando dos sicarios la interceptaron y le dispararon en tres ocasiones. Aunque sus familiares intentaron auxiliarla, Maria del Carmen murió por la gravedad de sus heridas.

Lede María Ortega Ortiz

fue secretaria de la Junta de Acción Comunal de la vereda Mundo Nuevo en el municipio de El Tarra. El 26 de enero, Lede María se encontraba en casa después de haber cerrado su negocio, cuando su expareja, Edwar David Menco Pabuena, llegó a atacarla con un arma blanca e impulsado por un ataque de celos, la dejó en grave estado de salud. Aunque la lideresa fue trasladada al hospital del municipio murió a causa de la gravedad de las heridas.

Liliana Holguín

Con 40 años, fue una lideresa social en el municipio de Caucasia, pertenecía a la mesa LGBTI+ del municipio. Era conductora de mototaxi y apoyaba actividades formativas además de adelantar acciones contra el desplazamiento forzado. El lunes 25 de febrero, mientras conducía su moto junto a su sobrino por la vía que conduce de Guáramo a Caucasia, fue alcanzada por otra motocicleta desde la cual les dispararon en repetidas ocasiones ocasionando la muerte de ambos. Wilson Castañeda, director de Caribe Afirmativo, afirmó que Liliana no había recibido amenazas por su labor de liderazgo social.

Diana Patricia Higuita

Según la Defensoría del Pueblo, Diana Patricia fue expresidenta de la Junta de Acción Comunal de la vereda Los Venados del municipio de Ituango, además era la delegada de su vereda para el Programa Nacional Integral de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito (PNIS). Fue asesinada el miércoles 8 de mayo en zona rural del corregimiento Santa Rita de Ituango con impactos de bala. Su madre fue quien alertó a las autoridades sobre su asesinato, al llevar su cadáver en alto estado de descomposición desde zona rural del municipio hacia el casco urbano.

Diana Gutiérrez

Con 25 años, era prima del líder William Gutiérrez, perteneciente al movimiento Ríos Vivos. Según los reportes, Diana murió el 16 de mayo, en el municipio de Tarazá, en medio de un ataque en un establecimiento comercial, en donde personas armadas lanzaron una granada y abrieron fuego dejando siete heridos y dos personas asesinadas. Según medios de comunicación, Diana era oriunda de Ituango y era madre de dos hijos.

Cindy Yulieth Pelayo

Con 30 años, fue secretaria de la Institución Educativa Santo Domingo en el municipio de Caucasia. La asesinaron el 10 de noviembre con impactos de bala en su casa ubicada en el barrio Dromedario. Sus vecinos alertaron a la Policía cuando vieron su cadáver tendido en el piso de la sala de su residencia, que tenía la puerta abierta. Si bien la Policía tuvo la hipótesis de que se trataba de un "tema pasional", aclararon que no había testigos del crimen, además de acotar que Cindy Yulieth era madre de tres hijos.

Remedia Aizama

Con 26 años, fue la encargada de los alimentos en un jardín infantil del Resguardo Chamí Copé del río Ingará, de la comunidad Embera Dóvida, en el municipio de San José del Palmar. El 1 de mayo, Remedia fue asesinada en un ataque en el que le propinaron impactos con arma de fuego. En el ataque también resultó herida una niña de 12 años.

Aydali Ortega Marulanda

Fue enfermera en el hospital local del municipio de Vijes y fue presidenta de Junta de Acción Comunal. Además, la comunidad cuenta que realizó labores comunitarias en zonas vulnerables del municipio. El 15 de mayo, fue asesinada en la vereda Los Hispanos, donde vivía, por hombres armados que le propinaron impactos de bala. Aydali era madre de dos hijos y ya había denunciado amenazas en su contra.

Cristina Bautista Taquinás

Con 42 años, fue la gobernadora indígena de la comunidad de Tacueyó en el municipio de Toribío. Poco tiempo antes de ser asesinada había obtenido un título como trabajadora social de la Universidad del Valle. Trabajó por los derechos humanos de las comunidades indígenas, le gustaba el ejercicio organizativo, era muy reconocida por su comunidad y con todas estas habilidades llegó a convertirse en una autoridad neehwe'sx. Fue asesinada el 29 de octubre en vía pública a la altura de la vereda La Luz, cuando la camioneta en la que iba junto con otras personas fue emboscada por hombres armados que abrieron fuego durante más de 10 minutos contra el vehículo.

Karina Garcia Sierra (31 años), Otilia Sierra, Aidé Trochez y Ladevis Ramos

Karina fue personera y candidata a la Alcaldía de Suárez, luchó por convertirse en la primera mujer alcaldesa de ese municipio. Otilia, era madre de Karina. Aidé desarrolló labores como coordinadora municipal de la participación de las víctimas en el municipio de Suárez, era reconocida por esta gestón a nivel nacional y por sus compañeros y compañeras, por su humildad y gran capacidad de liderazgo. Ladevis, según el Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), fue "comunera indígena y seguidora de la campaña de Alto Rico, jurisdicción del resguardo Indígena Cerro Tijeras", en el municipio de Suárez. Las 4 fueron asesinadas asesinada en un atentado el 1 de septiembre en el municipio. Mientras se dirigían en una camioneta, a la altura del corregimiento Betulia, hombres armados interceptaron el vehículo y abrieron fuego indiscriminadamente contra este. Después de asesinarlas junto con otro líder más, los agresores incineraron la camioneta. Karina era madre de un menor de edad y había advertido sobre amenzas en su contra días antes de su asesinato.

Yuliana Chirimuscay Velasco

Con 15 años, fue una integrante de la comunidad indígena Misak del municipio de Silvia y cursaba décimo grado del colegio Agropecuario Misak Mamá Manuela. Desapareció el fin de semana del 11 de mayo mientras se celebraba una fiesta en el municipio. Posteriormente su cuerpo fue hallado a las orillas del río Piendamó completamente desnuda y con signos claros de tortura y abuso sexual. Las autoridades indígenas capturaron a dos jóvenes para interrogarlos, quienes se encontraban en la fiesta y eran sospechosos del feminicidio. El crimen de Yuliana causó mucha consternación dentro de la comunidad.

Aida Islena Montenegro

Con 36 años, fue docente del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) del municipio de El Tambo. Fue atacada el 13 de mayo en su casa. Su pareja, en medio de un supuesto ataque de celos, la agredió con un arma blanca. Con una herida en la parte izquierda de su pecho, fue trasladada al hospital de la localidad, sin embargo murió por la gravedad de la misma. Aida tenía hijos, quienes, se dice, presenciaron su asesinato.

Carmen Nené

Con 35 años, era comunera indígena del Resguardo de Pitayó en el municipio de Caldono y madre de tres hijos. El 25 de diciembre su cadáver fue hallado en el sector de Las Cruces, cercano al casco urbano del municipio de Silvia. Su cuerpo tenía signos de tortura y heridas de arma blanca en varias partes del cuerpo. Anteriormente había hecho denuncias en contra de su expareja, quien presuntamente la maltrataba. Posterior a su crimen, las autoridades capturaron a quien sería su feminicida y expareja, Luis Eduardo Chocue Casso, a quien se le imputó el delito de homicidio y se le encarceló en la ciudad de Popayán.

Marlly Fernanda Quina Campo

Fue una reconocida lideresa del Resguardo de Piniquitá en el municipio de Totoró. Fue asesinada el 27 de marzo por su pareja mientras se desplazaban juntos hacia su casa. A la altura de la vereda Alto Novirao, el feminicida, John Jairo Zambrano Yandi, la asfixió y atacó con arma blanca, posteriormente se suicidó.

Amparo Guegia Mestizo

Con 41 años, fue lideresa indígena del Resguardo Huellas en el municipio de Caloto, era reconocida por ser una de las fundadoras del Movimiento Nietos del Quintin Lame. Fue asesinada el 10 de enero de este año junto con su hijo en el corregimiento del Palo del municipio. Al parecer, los asesinaron mientras se transportaban en una motocicleta por la vía que comunica los municipios de Caloto y Toribío.

Virginia Silva

Con 71 años de edad, era una lideresa espiritual del Resguardo Indígena de Belalcazar-Páez en la vereda El Canelo del municipio de Páez. Fue asesinada el 7 de enero de este año cuando hombres armados entraron a su vivienda y le dispararon en dos ocasiones, en el cráneo y el antebrazo. Al parecer, Virginia había recibido mensajes de amenaza de muerte por parte de grupos armados. Las autoridades atribuyeron el crimen a la disidencia de la antigua guerrilla de las FARC.

Luz Eneida Ipía Chocué

Con 33 años, era integrante del Resguardo Indígena de Las Delicias en el municipio de Buenos Aires y era madre de dos hijas. Fue asesinada el 8 de marzo por su pareja, Óscar Duván Salazar, quien la agredió con arma blanca en medio de una discusión cuando ella se encontraba regresando a casa. Las heridas que el feminicida le causó en la parte izquierda de su pecho le causaron la muerte, aún después de haber sido llevada para ser tratada a un hospital en el municipio de Santander de Quilichao.

Silvia Maritza Ramírez Chaverra

Con 42 años, fue lideresa del corregimiento Aguas Blancas, en el municipio de Tumaco, y era presidenta de la Junta de Acción Comunal (JAC). La lideresa adelantaba procesos con la comunidad relacionados con el Programa Nacional de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito (PNIS). Aunque los hechos de su asesinato no fueron del todo claros, algunas versiones indican que habría sido vista por última vez en un sector conocido como El Tigre siendo abordada por un grupo de hombres. El 24 de enero, después de 10 días de su desaparición, Silvia fue encontrada en El Tigre, en la vía de Tumaco que conduce a Pasto, con traumatismo en la cabeza y problemas respiratorios. En grave estado de salud fue trasladada al Hospital Universitario de Nariño, pero los médicos no pudieron salvar su vida. Maritza ya había denunciado amenazas en su contra.

Rocío García Paí

Fue integrante de la comunidad Awá del Resguardo Hojal la Turbia, del municipio de Tumaco. Después de estar tres días desaparecida, su cadáver fue hallado en el Río Nulpe con varios impactos de bala y signos de tortura. Los hechos ocurrieron después de una amenaza, el pasado 5 de junio, cuando se realizaba la asamblea general de la Unidad Indígena Del Pueblo Awá (UNIPA). Rocío era madre de dos hijos.

Lucy Villarreal

Con 32 años, fue una lideresa social y gestora cultural muy reconocida por su comunidad. El 23 de diciembre, después de dirigir una charla sobre los derechos de la mujer en la vereda La Espriella, Lucy fue asesinada a tiros por un hombre en el municipio de Tumaco cuando ella se disponía a subir en un bus que la llevaría de regreso a su casa en Pasto, Nariño, donde la esperaban sus familiares para celebrar la Navidad.

Leidy Jackeline Burgos Paí

Con 18 años, pertenecía a la Guardia Indígena en el Resguardo Indígena Honda Río Guiza, en el municipio de Barbacoas. Cursaba grado 11 en la Institución Educativa Indígena Técnica Agroambiental Bilingüe Awá - IETABA. Leidy desapareció el día 6 de junio después de asistir a una asamblea general de la UNIPA, posteriormente su cadaver fue hallado cerca a su casa con signos de tortura y varios impactos de bala. La UNIPA dio a conocer que anteriormente se habían recibido amenazas contra el pueblo Awá.

Lilia Patricia García

Con 43 años, fue secretaria del Cabildo Indígena Awá de Watsalpí. El 13 de octubre, en horas de la mañana, fue asesinada cerca a la quebrada Guaguí, Corregimiento de Buenavista, en el municipio de Barbacoas. Un hombre encapuchado le disparó por la espalda. Lilia era madre de seis hijos.

Maria Nelly Bernal Andrade

Fue comunera e integrante de la Guardia Indígena del Cabildo del Pueblo Pastos. Fue asesinada el 14 de febrero cuando se dirigía a su residencia en el municipio de Samaniego, recibió cinco impactos de bala. Según el gobernador del cabildo, Luis Eusebio, no existe más información sobre cómo y por qué sucedieron los hechos.

Paula Andrea Rosero Ordoñez

Con 47 años, fue personera municipal de Samaniego. El 20 de mayo, en un sector denominado ‘Romboide', mientras se movilizaba en su carro, Paula fue abordada por dos hombres en motocicleta quienes le dispararon en repetidas ocasiones dejándola mal herida. Rosero recibió amenazas en 2016 tras revelar manejos irregulares de los recursos y actos de corrupción al interior del Hospital Lorencita Villegas. Paula era madre de dos hijas.

Ermencia Enriquez Adrada

Fue madre de un líder social y defensor de derechos humanos, Fabio Montero, de la vereda El Sauce, zona rural del municipio de Leiva. El 27 de diciembre, sujetos armados llegaron hasta la vivienda del lider social y, al no encontrarlo, Ermencia fue asesinada junto con otro integrante de la familia. Hasta el momento se desconoce quiénes son los autores de este doble crimen.

Magdalena Cucubaná

Con 72 años, fue lideresa de la comunidad indígena Makaguan en el municipio de Tame y fue una de las fundadoras del partido político Movimiento Alternativo Indígena y Social (MAIS). El 3 de septiembre su cadáver fue hallado degollado en su casa. La Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) se pronunció rechazando el crimen de Magdalena, catalogándolo como "una clara muestra de una política de exterminio hacia nuestros líderes y pueblos ancestrales".

Marleny Rueda Giraldo (35 años) y Martha Cecilia Pérez Giraldo (40 años

Eran hermanas, e hicieron parte de la organización social Amanecer de Mujeres por Arauca (AMAR) en el municipio de Saravena. Fueron asesinadas el mismo día y casi a la misma hora, pero los crímenes ocurrieron en diferentes puntos del municipio. El 22 de diciembre fueron encontrados los cadáveres con impactos de bala. Marleny fue encontrada en el sector del antiguo Idema y Martha fue encontrada en el asentamiento conocido como La Unión.

Zaira Bellasmín Pérez Hinajosa

Fue vocera comunal del municipio de Arauca y candidata a edil en 2015 para la Junta Administradora Local de la Comuna 1, además era representante comunitaria del asentamiento Los Güires. Fue herida con arma de fuego el 16 de febrero en el sector de la cancha Los Güires. Posteriormente, el día 20 del mismo mes, murió por la gravedad de las heridas en el Hospital El Tunal de Bogotá.

Laura Nayibe Peña Cáceres

Con 24 años y oriunda del municipio de Cerrito, fue jefe de enfermería en el hospital del Sarare en el municipio de Saravena, además era afiliada a la Asociación Nacional Sindical de Trabajadores y Servidores Públicos de la Salud y Seguridad Social Integral y Servicios Complementarios de Colombia – ANTHOC. Se destacó por ser una mujer sencilla, con gran calidad humana y presta a enseñar y servir. Laura fue atacada durante la noche del 20 de enero mientras regresaba a su casa, por un sujeto que habría pretendido robarle. Al negarse al supuesto atraco, el sujeto le disparó en el tórax. Laura fue trasladada por amigos al Hospital del Sarare, pero más tarde murió por la gravedad de las heridas.

Sandra Mayerly Baquero

Con 31 años, fue docente en el Colegio Santa Teresita del barrio Jerusalén, municipio de Arauca. Si bien los hechos de su asesinato no se conocen claramente, el 7 de febrero de este año habría sido atacada por quien entonces era su pareja. El supuesto feminicida le habría causado heridas mortales con un arma blanca dentro de su casa.

Concepción Corredor

Con 42 años, fue presidenta de la Junta de Acción Comunal de la vereda La Pradera del municipio de Nunchía. También era integrante de la Comisión de Mujeres del partido Alianza Verde. El 23 de mayo, Nancy fue sacada a la fuerza de su lugar de residencia por dos hombres que se identificaron como parte del grupo armado ilegal ELN, alegando que necesitaba atender asuntos personales y amenazando a su familia con no avisar a las autoridades. El 24 de mayo, un día después, su cadáver fue encontrado cerca a la carretera que conduce a la vereda El Caucho.

Yamile Guerra

Con 42 años, fue abogada y dirigente política en el municipio de Floridablanca. Fue secretaria general de la Personería de Bogotá, contralora del municipio de Rionegro y personera del municipio de Matanza. Además, había aspirado a la Alcaldía de Bucaramanga. Lideró un litigio de tierras contra una invasión en el barrio Zapamanga de ese municipio. El 20 de agosto fue a una cita con dos hombres para la negociación del letigio de tierras. Al parecer, al finalizar la reunión, la lideresa se habría dado vuelta para salir del lugar cuando una de las personas le disparó en el pecho, causándole una muerte instantánea.

Doris Góngora Guerra

Con 46 años, fue madre de un hogar comunitario del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) en el municipio de Soacha. El 20 de junio, fue hallado su cadáver junto al de su hija (7 años) en el hogar comunitario. Ambos cuerpos estaban degollados y presentaban signos de tortura. Las autoridades determinaron que un sobrino de la lideresa fue quien habría entrado a su casa y acabado con ambas vidas por robar dinero.

Nancy Astrid Conde Gutiérrez

Fue lideres indígena perteneciente al Resguardo Tortugaña de la comunidad Awá. Nancy fue perteneciente a la antigua guerrilla de las FARC. Tras su desmovilización con el último Acuerdo de Paz, fue participante activa en los procesos de reincorporación en Bogotá. Además, hacía parte del grupo de mujeres Defensa y Derechos. Las versiones indican que Nancy fue asesinada, el 5 de marzo de este año, en la entrada de su casa en el sector El Tintal, al suroccidente de Bogotá. Al parecer, un sujeto desconocido le disparó con arma de fuego. Nancy era madre de dos hijos.

Mireya Hernández Guevara

Fue tesorera de la Junta de Acción Comunal del barrio 20 de Julio en el municipio de Algeciras, también pertenecía a la Despensa Agrícola del Huila. El 8 de enero de este año, Mireya se encontraba yendo a su casa junto a su esposo, cuando fue atacada con arma de fuego por desconocidos que se movilizaban en moto. Herida fue trasladada a un hospital de la región, donde llegó sin signos vitales.

Sonia Rosero González

Con 45 años, fue médica y aspirante a la Alcaldía del municipio de Puerto Asís, además lideraba una campaña en contra de la violencia contra la mujer llamada "Yo Elevo mi Voz". El 24 de febrero, Sonia fue atacada mientras se encontraba en una IPS, al parecer en una reunión política, cuando un sujeto armado entró al establecimiento y le disparó en seis ocasiones. A pesar de ser trasladada a un centro de salud en la ciudad de Cali, su grave estado de salud, con afectaciones en el útero y el intestino, le causaron la muerte.

Yaneth Ordoñez y Maria Maura Ortega

Madre e hija, fueron lideresas integrantes de la Junta de Acción Comunal (JAC) del municipio de Puerto Asís. Además, fueron cofundadoras de su comunidad, en la vereda de Campoquema. Murió el 17 de marzo junto a su madre en un ataque realizado con arma de fuego por sujetos desconocidos mientras se encontraban en su casa.

Rocío Milena García Giraldo

Con 39 años, fue afiliada a la JAC de la comunidad de San Salvador de la Zona de Reserva Campesina Perla Amazónica en el municipio de Puerto Asís. También se adhirió al Programa Nacional de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito (PNIS). Según la Asociación de Desarrollo Sostenible Perla Amazónica (ADISPA), el 23 de febrero Rocío se encontraba movilizándose junto a su pareja en un bote rumbo a la vereda Peñasorá y al parecer el bote falló y colisionó. Al lugar habrían llegado varios hombres, minutos después se escucharon disparos y un cuerpo arrojado al agua. El 24 de febrero fue hallado el cadáver del Rocío a orillas del río Putumayo, con dos impactos de bala en la cabeza.

Rosa Jacanamejoy

Con 63 años, fue una comunera indígena y médica indígena tradicional en el municipio de Sibundoy. El 31 de octubre, su cadáver fue hallado por sus familiares junto con el de su esposo en las camas de su vivienda, ambos tenían heridas con arma blanca. Rosa tenía hijos.

Gloria Isabel Ocampo

Con 37 años, y oriunda de Virginia, Quindío, apoyó la sustitución de cultivos de uso ilícito y hacía parte de la organización Tejedoras de Vida en el municipio de Puerto Guzmán. El 7 de enero de este año se encontraba comiendo en su casa junto a su hija y su esposo. A un llamado en la puerta atendió a dos sujetos preguntando por ella que, al confirmar su identidad, le dispararon en varias ocasiones, arrebatándole la vida y huyendo del lugar en una moto. Ya se conocía de amenazas en contra de Gloria por la labor que realizaba.

Maritza Isabel Quiroz Leiva

Con 60 años, fue una lideresa muy reconocida por su comunidad, era suplente de la Mesa de Víctimas del municipio de Santa Marta y líder de mujeres afro víctimas de desplazamiento. El 5 de enero, Maritza se encontraba en su casa cuando dos sujetos tocaron a su puerta, ella le dijo a su hijo menor que fuera a esconderse. Al abrir, uno de ellos le disparó en dos ocasiones. La lideresa había recibido amenazas en el 2018 y la Corte Constitucional había solicitado protección para ella.

Natalia Jiménez

Con 35 años, fue ecologista, antropóloga y trabajaba con la Fundación Natura, allí dirigía el proyecto Magdalena-Cauca Vive, que se enfocaba en la conservación de la cuenca de los ríos Magdalena y Cauca. El 20 de diciembre, Natalia se encontraba junto a su pareja celebrando su luna de miel y se dirigían hacia el municipio de Palomino en La Guajira. Ella hablaba telefónicamente con su padre cuando la amenazaron de muerte para que parara el vehículo y colgara el teléfono. El 23 de diciembre los cadáveres de Natalia y su pareja fueron encontrados por un campesino en la vereda Perico Aguao en Santa Marta, los cuerpos tenían capuchas en la cabeza, manos atadas, signos de tortura y tiros de gracia.