Nordeste

Para los líderes y lideresas de la subregión del Nordeste antioqueño, "un medio de prevención es la autocensura, hay casos que no se saben, los líderes salen calladitos desplazados pero nadie sabe", relatan. Esto se reflejaría en que entre 2018 y 2020 la Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento (CODHES) no tenga cifras de víctimas ni eventos de desplazamiento masivos en esta subregión. En 2017 registró 182 víctimas, de las cuales 170 corresponden al municipio de Segovia.

Esta situación sería la causa de que los registros de asesinatos o agresiones en la subregión no sea tan elevado como en otras. Según el cruce propio de las bases de datos de diferentes organizaciones de derechos humanos referenciado en este especial, en el Nordeste antioqueño se han documentado al menos siete casos de agresiones contra líderes y lideresas, en los que prevalece el homicidio a liderazgos mineros y amenazas colectivas a integrantes del mismo sector.

La presencia y el control territorial de grupos armados ilegales representa un riesgo para los liderazgos porque muchas veces deben interlocutar con estos actores, no por gusto, sino para mantener una convivencia o "tensa calma" en la subregión. "Si la comunidad se pone de sapa, van a caerle al líder", afirman.

La implementación del Acuerdo de Paz se ha convertido en otro factor de riesgo e incluso, de estigmatización para los liderazgos de la región. "Los líderes que defendemos los PDET y la sustitución de cultivos de uso ilícito somos estigmatizados y perseguidos. Nos dicen "¿a usted quién lo mandó a decir esto?", cuando vamos a reclamar nuestros derechos", denuncian. En el caso de los liderazgos LGBTI+, se manifiesta que son aceptados en la subregión pero han salido panfletos amenazantes contra la población diversa. De nuevo, la no denuncia prevalece con el fin de salvaguardar la vida.

La Décima Cuarta Brigada tiene jurisdicción en las regiones del Nordeste y Magdalena Medio antioqueño y su sede principal está ubicada en el municipio de Puerto Berrio. En la subregión del Nordeste antioqueño hacen presencia el Batallón de infantería No 42- Batalla de Bomboná en el municipio de Anorí y el Batallón Vial y Energético No. 8 en la frontera entre Segovia y Remedios, los cuales están adscritos a la Décima Cuarta Brigada del Ejército Nacional.

En septiembre de 2017, Caracol Radio reportó la captura de cinco policías del municipio de Remedios por nexos con el Clan del Golfo o las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC). “Estos miembros de la Policía exigían dinero para no capturar a los cabecillas e integrantes del Clan del Golfo y no cumplir con los procedimientos de incautación, además de permitir la extorsión, el microtráfico y la minería ilegal en el municipio”, señala Caracol Radio.

Los liderazgos del Nordeste señalan que "el Ejército y la Policía saben cuáles son los grupos paramilitares, los negocios que tienen y en cuestiones de bioseguridad, los protocolos son nulos, pues llegan sin mascarillas".

Al cierre de esta edición, ni la Policía ni el Ejército respondieron a los cuestionarios enviados por La Paz en el Terreno en el que se consultó su accionar en el territorio en medio de la pandemia.

Las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) tendrían presencia en los diez municipios que componen la subregión del Nordeste antioqueño.

A raíz de la pandemia, los grupos armados ilegales han podido ganar control territorial sobre los municipios de esta subregión. La presencia de sus miembros no es estrictamente militar, también se camuflan como civiles y esto ha llevado a la configuración de nuevas dinámicas del conflicto en el que "se desconoce el éxito de estos grupos, porque piensan que la presencia es uniformada, en tropa, pero ahora pueden ser una sola persona", alertan los líderes y lideresas sociales.

El Observatorio de Drogas de Colombia registró 1.261 hectáreas (ha) de cultivos de uso ilícito en la subregión del Nordeste antioqueño. De los 10 municipios que componen esta subregión, hay presencia de cultivos de coca en siete de ellos. Los municipios de Cisneros, San Roque y Santo Domingo no tienen hectáreas registradas. Anorí encabeza la lista en el Nordeste al concentrar cerca del 60% de cultivos de uso ilícito en la subregión, seguido de Segovia con el 15,7% y Amalfi con el 15,1%

En la subregión del Nordeste nacen dos corredores estratégicos para el narcotráfico. El primero parte en Segovia y conecta a Bolívar y, posteriormente, a Catatumbo. El segundo inicia en Anorí y termina en el Urabá chocoano, relatan los liderazgos del departamento.

"Antes de 2016, usted en una vereda, en términos de microtráfico, no existía porque las FARC no dejaban entrar eso. Después de la firma del Acuerdo de paz, actualmente, prácticamente toda la zona rural tiene microtráfico, esto ha generado que los paramilitares entren al territorio. El mecanismo fue por jóvenes que traían el consumo", alertan algunos líderes y lideresas del departamento de Antioquia. Los municipios con más presencia y afectación de microtráfico son los mineros, es decir, Remedios y Segovia, porque es una zona muy rentable. "Un ‘cacho’ (de marihuana) vale 20 (mil pesos) más de lo que vale en Medellín y eso genera disputa entre estos grupos, por el dominio del microtráfico en zona minera", relatan.

Los municipios de Remedios y Segovia "tienen un alto porcentaje en reservas minerales, en especial, oro, lo que se traduce, en una fuerte presencia de las multinacionales minerales como la Zandor Capital S.A. y la Gran Colombia Gold", expone el informe ¡Paz, ni en el horizonte! Crisis humanitaria, liderazgos en riesgo e incumplimiento del Acuerdo de Paz en Antioquia de la Corporación Jurídica Libertad en alianza con la Fundación Sumapaz. En Segovia se produce el 22% del departamento y en Remedios el 17%, a través de la Gran Colombia Gold, según el informe "Minería del Oro, territorio y conflicto en Colombia" de María Soledad Betancourt Betancourt.

En la subregión del Nordeste antioqueño existen 1.230 solicitudes de restitución, de las cuales, el 20,8% se concentran en el municipio de Remedios, según una base de datos de la Unidad de Restitución de Tierras. El municipio de Remedios hace parte de la Zona de Reserva Campesina del Valle del río Cimitarra y aunque se están gestando proyectos productivos y de ecoturismo, los líderes y lideresas de la subregión relatan que el proceso legal de tenencia de la tierra se ha dado en menor medida en el municipio.