A sus 33 años, Emilsen había denunciado violaciones a los Derechos Humanos en el corregimiento de Bajo Calima, en Buenaventura, y había apoyado varios procesos comunitarios de defensa del territorio, como por ejemplo, en contra de la exploración petrolera y de la ubicación de un relleno sanitario dentro del Consejo Comunitario del Bajo Calima, que integraba.

Pedro*, un líder de una organización comunitaria en la que también trabajaba Emilsen le dijo a La Paz en el Terreno que la defensora había comenzado su labor bajo el acompañamiento de la ONG Comisión Intereclesial de Justicia y Paz y, luego, se había convertido en vocera local de la Red de Comunidades Construyendo Paz en los Territorios Conpaz.

La noche del sábado 14 de enero del año 2017, la lideresa y su esposo, Joe Javier Rodallega, tomaron un taxi desde la casa de la suegra de Emilsen. Tres días después, el martes 17, los cuerpos de la pareja fueron encontrados sin vida, amordazados, atados y degollagos, según publicó la Fiscalía en un comunicado de prensa.

Los últimos hechos que había denunciado, según su organización, estaban ligados a presuntas estructuras paramilitares en Buenaventura que han controlado la libre movilidad de los habitantes de la zona. “Desde el casco urbano hay un corredor que conduce hacia la cuenca baja del río Calima y sobre esa vía se venían haciendo retenes, al parecer, por parte de paramilitares. A través de ellos pretendían controlar esa ruta del narcotráfico que se mueve hacia el Pacífico en la desembocadura del río San Juan”, afirmó Pedro*.

Según conocidos de Emilsen, durante los últimos años, ella había acompañado a las comunidades indígenas de la zona en su retorno al Resguardo de Santa Rosa Guayacán del Bajo Calima, luego de que, años atrás, estas hubieran sufrido varios desplazamientos forzados por parte de paramilitares y de miembros de la fuerza pública. Según reportes de prensa, la lideresa también estaba dedicada a la documentación de violaciones a los Derechos Humanos para la Comisión de la Verdad, la entidad creada con la firma del Acuerdo de Paz que tiene la misión de esclarecer los hechos violentos ocurridos en el marco del conflicto armado en Colombia.

El medio latinoamericano Telesur TV reportó que “días atrás, Joe Javier Rodallega había sido amenazado y una camioneta había estado rodeando la vivienda de la pareja”. Pedro* señaló que aunque la lideresa no había reportado amenazas recientemente, “se puede sobreentender que, por el trabajo que realizaba, pudo haber tenido alguna por cualquier persona que no estuviera de acuerdo con su trabajo”.

A través de un comunicado oficial, la exguerrilla y ahora partido político Farc anunció que poseía información que apunta a que el asesino de la pareja fue Marco Antonio  Manyoma Ocampo, alias ‘Camilo Robledo’, disidente del Frente 30 de las Farc y hermano de la defensora. En el comunicado, firmado por el Estado Mayor Bloque Occidental Comandante Alfonso Cano de las Farc, el presunto asesino habría robado armas y bienes de la exguerrilla antes de desertar. Alias ‘Camilo Robledo’ no ha sido detenido.

Según Pedro*, Emilsen Manyoma estuvo muy cerca de su hermano luego de que desertó de las Farc, en diciembre de 2016.  “Tuvimos conocimiento de que ella, en su labor de defensa de los Derechos Humanos, estuvo muy cerca de él, haciéndole recomendaciones de que volviera al Proceso de Paz, para que pudiera ser parte de los beneficios que trajera el Acuerdo”, afirmó el líder.

El 3 de febrero del mismo año, fue enviado a la cárcel Julio César Valencia Moreno, el taxista que transportó a los presuntos asesinos de la pareja. Así lo decidió un juzgado penal, acogiendo la petición de la Fiscalía 38 Seccional de Buenaventura.

Además, el 13 de febrero de 2017, un hombre apodado con el alias de ‘Súper’ fue detenido por el CTI de la Fiscalía, con apoyo de la Brigada 2 de Infantería en el caserío Guaduales, sector de Bajo Calima. Alias ‘Súper’ fue juzgado por el delito de homicidio agravado y fue enviado a la cárcel a pesar de que no aceptó los cargos, según un comunicado de prensa de la Fiscalía.

*El nombre fue cambiado por razones de seguridad.