Idrobo Navia
Jamer Alberto Idrobo Navia fue un campesino de 39 años, que lideraba el proceso de sustitución de cultivos de uso ilícito en Balboa, Cauca. Idrobo era el segundo de tres hermanos y había dedicado parte de su vida al trabajo comunitario.
En 2011, el líder se lanzó como concejal de Cauca y ganó las elecciones para el periodo de 2010 a 2014. Tras su paso por el Consejo decidió apoyar la campaña del Sí para el plebiscito que buscó refrendar el acuerdo de paz. Desde ese momento, Idrobo Navia empezó su liderazgo enfocado en apoyar a las comunidades cocaleras a través de la Asociación de Campesino de Balboa.
Por medio de la Asociación de Campesinos, llegó a la Coordinadora de Cultivadores de Coca, Amapola y Marihuana, Cocam, que tiene desde el 2017 un acompañamiento a las comunidades para sustitución de cultivos de uso ilícito, con el fin de apoyarlas con el punto cuatro del Acuerdo.
Idrobo, dentro de Cocam, tenía a su cargo la coordinación de la vereda La Joaquina, en la que apoyaba a los pobladores en la erradicación de los cultivos de uso ilícito y en socializar las rutas y directrices del gobierno frente al manejo de los cultivos de coca. Además, apoyaba el diseño de un plan de cultivos lícitos que dé las ganancias necesarias para sobrevivir y mejorar las condiciones de vida de la vereda.
Solmey Botenía, líder de sustitución de cultivos y representante de la Asociación de Campesinos de Balboa, manifestó el desinterés colectivo y en especial el del gobierno en el tema de erradicación. Además, denunció las pocas garantías de seguridad para los líderes de sustitución en la región.
Jaime Idrobo se desplazaba por una carretera de Patía cuando dos hombres lo interceptaron y le dispararon varias veces. Murió al instante. La Policía llegó a la media hora del crimen e informó a Botenía que uno de los líderes campesinos había sido asesinado.
El líder, según personas cercanas a él, habría recibido amenazas en su casa cerca a Popayán. Los representantes de Cocam no conocen sobre dichas amenazas y tampoco si han sido denunciadas. Tras su muerte, sus padres se encuentran en mal estado de salud y angustiados porque no saben si las amenazas continuarán contra ellos. Un miembro de su familia afirmó que desde hacía un tiempo ha habido hombres armados pasando por la casa de algunos miembros de la familia. De acuerdo con Coccam, hasta agosto de 2018, la Fiscalía se encuentra investigando el crimen.