Luis Gerardo Ochoa Sánchez era defensor de Derechos Humanos y abogado radicado en Pitalito, Huila, lugar en el que nació. Fue precandidato a la Alcaldía de este municipio por el partido Centro Democrático. Su vida política fue activa, según su hermana Ximena Ochoa, ya que fue personero del municipio de Albania, Caquetá, y de Pitalito.

En los últimos años, Ochoa trabajó como abogado litigante y antes de su muerte, estuvo al frente de un proyecto de viviendas llamado La Ciudad de Dios del municipio de Pitalito. Las personas afectadas de este proyecto eran cerca de 320 familias de escasos recursos quienes durante varios años había ahorrado para tener su vivienda propia. Estas familias integraban la Fundación Café de Soginco S.A.S. creada por el pastor Édgar Núñez Guzmán de la iglesia Cruzada Cristiana, en la que se creó el proyecto de vivienda. Este proyecto consistía en ahorrar por varios años, comprar el lote y construir las casas para estas familias.

El abogado encontró que el predio fue comprado con los ahorros de las 320 familias por el pastor Núñez y luego, revendido a un hombre que años atrás había pagado una condena por narcotráfico. Con esta nueva venta, el proyecto pasó de 320 casas a 1.400 apartamento que tendrían un costo de 55 millones. Al descubrir esto, Ochoa interpuso una demanda por la estafa a estas familias que se les estaba cobrando 55 millones por un apartamento que, según acuerdos previos, ya habían cancelado con sus ahorros.

Según Ximena Ochoa, por este hecho su hermano fue citado por la contraparte y forzado a dejar de lado la demanda. Él se rehusó y siguió con el caso. Días más tarde, sicarios llegaron a su oficina cerca al Palacio de Justicia de Pitalito y lo asesinaron. La Fiscalía ha estado investigando las causas de su muerte y los responsables de este hecho. El viernes 6 de abril de 2018, un año después de lo sucedido, se realizó una audiencia de acusación en la que se inculpó a Mauricio Ortiz Parra, Edgar Núñez Guzmán y al edil Luis Mario Colorado Rodas.