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Raúl,
Buitrago Perdomo
† 07.29.2018

Era el vicepresidente de la Junta de Acción Comunal del centro poblado de la inspección de La Fraguita, en el municipio de San José del Fragua, sur de Caquetá. Perteneció a la Asociación de Campesinos Portales del San José del Fragua, que está asociada a la Coordinación Departamental de Organizaciones Sociales, Ambientales y Campesinas del Caquetá, Coordesac, donde lideró proyectos ambientales. Dos hombres armados llegaron a su casa y le dispararon ocho veces. El asesinato fue perpetrado por presuntos miembros de las disidencias de las Farc.

Tipo de liderazgo:
Ambiental

Tipo de comunidad:
Comunidad campesina

Organización a la que pertenecía:
Asociación de Campesinos Portales del San José del Fragua

Fase de la investigación:
San José del Fragua, Caquetá

Raúl Buitrago Perdomo era conocido entre sus coterráneos como ‘Chinga’ y desempeñó un rol activo en el liderazgo de su comunidad. Justo antes de su muerte, el líder ambiental había acabado de salir de una reunión de socialización de la Asociación de Cafetería, que se había creado recientemente. Según una fuente cercana al líder, consultada por El Espectador, Buitrago Perdomo “mantenía una clara posición en contra de la incursión petrolera en la región”.

El municipio de San José del Fragua está ubicado al occidente de Caquetá, en los límites de este departamento con Cauca al occidente, Huila al norte y Putumayo al sur. Según documentó Rutas del Conflicto, por la zona han atravesado frentes guerrilleros y bloques paramilitares que han perpetrado varias masacres en los últimos 30 años, como la de las Farc en abril de 1989 y la del Frente Caquetá de las Accu (luego Auc) de enero de 1997.

A las 11 de la noche del 29 de julio del 2018, Raúl Buitrago Perdomo, de 46 años, regresaba a su casa proveniente de una reunión de socialización. Antes de llegar, dos hombres en moto le dispararon en ocho oportunidades y el líder cayó sin vida. Según informaron las autoridades en varios medios de comunicación, los perpetradores fueron presuntos disidentes del Frente 62 de las Farc, quienes en su huida pintaron letreros de las Farc-EP en algunas casas, en el centro de salud y en Centro de Desarrollo Infantil del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, ICBF, del corregimiento de Yurayaco, del municipio de San José del Fragua.

Además del asesinato del líder social y de los grafitis alusivos a las Farc-EP, a los disidentes del Frente 62 se les atribuye el cobro de extorsiones en Cauca y Caquetá.