Morato Flórez
Morato Flórez por más de cinco años había sido presidente de la Junta de Acción Comunal de El Tigre, municipio de Yondó, Antioquia. Su labor se centraba en denunciar anomalías de la red de electricidad suministrada por la empresa UNE-EMP. Según Iván Madero, presidente de la Corporación Regional para la Defensa de los Derechos Humanos, Morato empezó en 2014 a llevar a cabo procesos de instalación de redes domiciliarias de gas, además de denunciar la presencia del Eln.
Como lo relata varios medios de comunicación, Morato venía realizando el acompañamiento para que las familias del corregimiento se vincularán al proceso de implementación del Programa Nacional de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito. Al realizar este acompañamiento pudo como presidente de la JAC realizar un diagnóstico territorial para la política pública de paz y posconflicto para la Coordinadora Nacional de Cultivadores de Coca, Amapola y Marihuana, Coccam.
El 18 enero de 2018, mientras Morato realizaba una compras personales fue asesinado por dos hombres. El líder, según la Alcaldía de Yondó, no recibió amenazas previas. Al día siguiente del crimen, Gilbert Cartagena, alcalde del municipio, citó a un consejo de seguridad extraordinario con el objetivo de solicitar a las autoridades la investigación del asesinato y establecer una recompensa a quienes den información del caso.
Tras la investigación la Corporación Regional para la Defensa de Derechos Humanos, Credhos, denunció que a Iván Madero y Andrés Ortiz Nietos, dirigentes de Credhos, fueron amenazados por alias ‘Acuamán’ por las declaraciones hechas tras el asesinato de Morato. Credhos rechazó el crimen y pidió una pronta investigación, además de denunciar que el crimen fue cometido por paramilitares desconocidos y que Morato denunció la presencia de actores armados en la zonas días antes de su muerte. El crimen continúa en etapa de investigación y hasta el momento no se tiene indicios de posibles sospechosos.